00 21/12/2013 08:11
La modernización de los contadores de energía electromecánicos por electrónicos en el sector residencial constituye otro paso asumido por la Empresa Eléctrica de La Habana para asegurar una medición confiable del consumo en los hogares capitalinos.
La medida permite rebajar las pérdidas de energía eléctrica de esta ciudad, donde se utiliza el 30 por ciento de la electricidad del país, de ahí que permite dar una contribución decisiva a la economía en la Isla, al no perderse durante este calendario, por ejemplo, alrededor de un mes de energía a través de la detección de fraudes, sin descontar los trabajos realizados fundamentalmente en el sector estatal.
Los números ilustran: no se han perdido 300 gigawatt en el año, de los más de 3 mil que durante ese período utiliza la provincia.
Hasta la fecha pudieron cambiarse 42 mil 556 metros en el sector residencial y quedan pendientes unos mil por sustituir en el primer cuatrimestre del año entrante.
Al decir del director Comercial en la Empresa, Alaín González, son muy eficaces en la cruzada que libra la entidad contra la sustracción de la energía en el territorio, donde hubo en este calendario 11 mil 442 fraudes eléctricos; significa 54.2 gigawatt por concepto de energía dejada de facturar.
González comentó acerca de las ventajas de la instalación de 10 mil 339 contadores de energía para lectura infrarroja, que avanza actualmente en el capitalino municipio de Plaza de la Revolución.
La medición infrarroja elimina totalmente el error humano, pues ya el lector no tiene que restar, anotar, ni tomar la lectura con el TPL.
“Es un equipo parecido a este pero de tecnología más moderna, capaz de interactuar con el metrocontador. El lector pulsa un botón, el equipo y el metro contador se ven, recibe la información y esta se descarga en la oficina comercial. Al terminarse Plaza avanzaremos hacia Playa, ambos territorios con los mayores consumos promedio por consumidor: ascienden, respectivamente, a 309 y 288 kilowatt hora por cliente.
Extender paulatinamente la tecnología infrarroja eliminará las fallas de lectura que concentra la mayoría de las quejas contra la Empresa, además de reducir en una cifra considerable las pérdidas comerciales.