Por Francisco Forteza LA HABANA 5 (ANSA)- El 35to. Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana, con unos 500 filmes, la mayoría regionales, es tradicional aunque sin poder escapar al ambiente cubano actual con filmes como "Jirafas" y "Boccaccerías habaneras".
"Jirafas", una producción independiente del joven cineasta cubano Enrique Álvarez, tiene un título sin dudas original, tanto como su confección y su trama. Fue rodado en la Habana Vieja, el sector más antiguo de la capital cubana, totalmente en el interior de la casa de Álvarez. Narra la historia de dos amantes que ocupan una casa ajena para resolver su problema habitacional y terminan enfrentándose a la propietaria. Pero todos pueden ser expulsados de la casa por un inspector de vivienda, según el guión publicado. El problema habitacional en La Habana es reconocido como "muy complejo". Una cifra reciente indica que de las 700.000 viviendas en la ciudad, el 12 % está en mal estado.
Su creador Álvarez explicó al diario nacional Juventud Rebelde que su película trata sobre "una tribu urbana, una secta que habla un lenguaje privado e inaudible, unos jóvenes que ya no gritan porque sienten que no los escuchan". Por ello, agregó, uno de los protagonistas canta durante la película una canción que dice "Los hombres no me escuchan, no escuchan naaa… y solo me escuchan, solo me escuchan, las jirafas", de ahí el título.
El filme tiene la credencial de haber sido premiado con el Spirit Award, del Festival de Brooklyn, Nueva York.
"Boccaccerías habaneras", otra comedia, del también cubano Arturo Sotto retoma, como Jirafas, la costumbre del cine cubano de abordar problemas serios mediante la risa. En el actúan 50 artistas, entre estos algunos de los más prestigiosos de Cuba y "se inspira en Cuentos del Decamerón, del italiano Giovanni Boccaccio", se anunció.
No obstante, el 35 Festival que se inauguraba esta noche en el teatro Karl Marx, abría con un documental sobre este evento fundado hace tres décadas y media por personalidades culturales latinoamericanas encabezadas por el escritor Gabriel García Márquez, y con un filme chileno titulado Gloria, de Sebastíán Lelio, filmado en 2013. La protagonista Paulina García ganó el Oso de Oro de Berlín por la mejor interpretación femenina.
La mayoría de las obras que competirán por los Premios Coral que ofrece el Festival, vienen de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Cuba, Ecuador, Perú, Uruguay y Venezuela. También se exhibirán fuera de competencia obras de otras latitudes.
El festival rendirá un amplio homenaje a su fallecido director Alfredo Guevara, uno de los fundadores del llamado cine nuevo cubano y latinoamericano pero Iván Giroud, su nuevo director, ha anunciado la necesidad de "repensar" la cita que, dijo, está en una "encrucijada".
"Necesitamos respuestas a los nuevos e inaplazables problemas que se nos plantean, debemos repensar el cine, nuestro cine, desde la producción hasta la exhibición, y ese será el núcleo de las reflexiones" en el festival, estimó. Prometió no obstante que "mientras existan las premisas y las voluntades para que cada año La Habana sea centro para la promoción y la reflexión sobre el cine de Nuestra América, el Festival existirá". BY2-ADG/ACZ